La Espiritualidad Ignaciana y la Justicia Social

Ha llegado el momento de eliminar las desigualdades, de curar la injusticia que está minando la salud de toda la familia humana

- Papa Francisco, OIT 2021

Citas de algunos pontífices instruyendo sobre la Doctrina Social de la Iglesia Católica:

“Por grande que llegue a ser el progreso técnico y económico, ni la justicia ni la paz podrán existir en la tierra mientras los hombres no tengan conciencia de la dignidad que poseen como seres creados por Dios y elevados a la filiación divina”

- Papa Juan XXIII, Mater et Magistra (215)

“Toda la vida social es expresión de su inconfundible protagonista: la persona humana”

- Papa Juan Pablo II, Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia (106)

El peligro de rechazar el término “justicia social” …“es el de aceptar pasivamente lo que sucede a nuestro alrededor, con cierta indiferencia” porque “esto significa dejar crecer las desigualdades sociales y las injusticias”

- Papa Francisco, OIT 2024

Textos de la Biblia que el magisterio cita para instruir sobre la Doctrina Social de la Iglesia Católica:

“Si hay junto a ti algún pobre de entre tus hermanos... no endurezcas tu corazón ni cerrarás tu mano a tu hermano pobre, sino que le abrirás tu mano y le prestarás lo que necesite para remediar su indigencia” (Dt 15,7-8).

- Deuteronomio 15, 7-8

“El Espíritu del Señor está sobre mí! sepan que el Señor me ha ungido. Me ha enviado con un buen mensaje para los humildes, para sanar los corazones heridos, para anunciar a los desterrados su liberación, y a los presos su vuelta a la luz”

- Isaías 61, 1

El Espíritu del Señor me ha ungido para anunciar a los cautivos la libertad”

- Lucas 4, 18

“Ámense unos con otros, como yo los he amado”

- Juan 15, 12

“En verdad les digo que, cuando lo hicieron con alguno de los más pequeños de estos mis hermanos, me lo hicieron a mí”

- Mateo 25, 40

Los principios de la Doctrina Social de la Iglesia,
impulsan nuestro trabajo en este mundo

Uno

La vida y la dignidad de la persona

Cada persona es de un valor inestimable y más importante que cualquier cosa.

Aún más, el valor de las cosas e instituciones está condicionado a cuánto mejoran la calidad vida y la dignidad de la persona humana.

Dos

El llamado a la familia, a la comunidad y a la participación

Cada persona, no sólo es sagrada sino también social. La familia es la institución central de la sociedad y debe ser apoyada y fortalecida.

El individualismo excesivo destruye la identidad de la persona, porque los seres humanos crecemos y logramos nuestra realización en comunidad. Por lo tanto, procuramos una sociedad participativa e inclusiva.

Tres

Los derechos y deberes

Cada persona tiene el derecho a existir, a su integridad corporal y a los medios básicos que sostienen su vida. Por ejemplo: alimento, vestido, vivienda, descanso, asistencia médica, seguridad personal, etc.

Si bien cada persona tiene derechos, también tiene deberes y responsabilidades hacia su familia, hacia si mismo, hacia los otros y hacia la sociedad.

Cuatro

La opción por los pobres e indefensos

Cada persona puede participar activamente en la vida de la sociedad y aportar al bien común.
La Iglesia, desde su origen y a pesar de las faltas de muchos de sus miembros, no ha cesado en trabajar por el alivio, la defensa y la liberación del pobre.

No se trata de oponer una clase social en contra de otra sino, afirmar que la carencia, la desventaja y la impotencia de unos, perjudica el bienestar de todos en la comunidad.

La extensión del sufrimiento de los pobres, los excluidos y los marginados por la sociedad, se vuelve la medida que señala lo lejos que estamos de ser una verdadera comunidad de personas.

Cinco

La dignidad del trabajo y
los derechos de los trabajadores

Cada trabajador tiene derecho a que su trabajo no perjudique su salud física o integridad moral. Tiene derecho al descanso, a un salario justo, a asociarse, a organizarse y a unirse a sindicatos, a la propiedad privada y a la iniciativa económica.

La economía debe servir a la gente. Hoy en día, se enfatizan las ganancias de la empresa sobre el bienestar del trabajador.

El trabajo es más que un medio de ganarse la vida, es la manera de participar continuamente en la acción creadora de Dios.

Seis

Solidaridad

Cada uno de nosotros somos parte de la familia humana. Los habitantes del planeta son nuestros hermanos y hermanas, dondequiera que ellos vivan.

Dependemos los unos de los otros, sin importar nuestras diferencias nacionales, raciales, étnicas, económicas e ideológicas.

La solidaridad es la capacidad de trabajar por el bien común.

Siete

Cuidado de la creación de Dios

Cada persona muestra respeto y alaba al Creador protegiendo y cuidando la creación.

El daño al medio ambiente afecta la vida en el planeta en sus dimensiones sociales, económicas, distributivas y políticas. Pero por sobretodo, tiene mayor impacto sobre los pobres y vulnerables, en los países y comunidades en desarrollo.

Es requisito de nuestra fe proteger nuestra “casa común”, responder a los peligros y desafíos del cambio climático, reducir el uso de combustibles fósiles y cambiar nuestros hábitos de consumo.

“El hombre, separado de Dios, se torna inhumano para sí y para sus semejantes, porque las relaciones humanas exigen de modo absoluto la relación directa de la conciencia del hombre con Dios, fuente de toda verdad, justicia y amor”

- Papa Juan XXIII, Mater et Magistra (215)

Para profundizar

Qué es la Doctrina Social de la Iglesia

Una introducción en dos partes explicando de qué se trata la doctrina social de la Iglesia

por José Antonio Cinco Panes

Qué es la Doctrina Social de la Iglesia - primera parte

(3 minutos y 32 segundos)

Qué es la Doctrina Social de la Iglesia - segunda parte

(3 minutos y 12 segundos)

“La amistad con los pobres nos hace amigos del Rey Eterno. El amor de esa pobreza nos hace reyes aun en la Tierra, y reyes no ya de la Tierra sino del Cielo. Lo cual se ve porque el Reino de los Cielos está prometido para después a los pobres, a los que padecen tribulaciones, y está prometido ya de presente por la Verdad Inmutable, que dice: «Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos» (Mt 5,3), porque ya ahora tienen derecho al Reino”

— “A los Padres y Hermanos de Padua” Carta escrita por Juan Alfonso de Polanco, SJ
“por comisión de nuestro en Jesucristo Padre Maestro Ignacio”, en Roma el 7 de agosto de 1547.

La Carta: Laudato Si

Un llamado del Papa Francisco por el cuidado del planeta.


Para verla en español entra a “settings” para cambiar el idioma. (1 hora, 21 minutos y 41 segundos)

Documentos

Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia

por el Papa Juan Pablo II

(220 páginas)

Compartiendo la Enseñanza Social Católica

por la Conferencia Episcopal de Obispos de los Estados Unidos de América (USCCB)

(20 páginas)

Laudato si. Sobre el cuidado de la casa común

Encíclica del Papa Francisco

(198 páginas)

Laudate Deum. A todas las personas de buena voluntad sobre la crisis climática

Exhortación apostólica del Papa Francisco

(18 páginas)

Justicia económica para todos

por la Conferencia Episcopal de Obispos de los Estados Unidos de América (USCCB)

(90 páginas)